Uber, la tecnología como aliada

Uber, la tecnología como aliada

Th Uber Technologies Inc. car service application (app) is demonstrated for a photograph on an Apple Inc. iPhone in New York, U.S., on Wednesday, Aug. 6, 2014. For San Francisco-based Uber Technologies Inc. which recently raised $1.2 billion of investors' financing at $17 billion valuation, New York is its biggest by revenue among the 150 cities in which it operates across 42 countries. The Hamptons are a pop-up market for high-end season weekends where the average trip is three time that of an average trip in New York City. Photographer: Victor J. Blue/Bloomberg via Getty Images

Las redes sociales son buenos termómetros para medir la aceptación o el rechazo de las marcas. En Twitter, Facebook e Instagram se generan miles de reacciones sobre diversos temas y la popular aplicación, Uber no podía ser la excepción. A mediados de mes, los taxistas de Santiago y diversas ciudades del país realizaron paro de medio día, la razón: llamar la atención del Gobierno y los usuarios para regular esta aplicación, que consideran una competencia desleal.

La compañía creada por el estadounidense, Travis Kalanick, desarrolló una estrategia para hacer frente al paro con la promoción #SantiagoNoPara, en la que se ofrecían dos viajes gratis por 10 mil pesos cada uno entre las 6:30 am y las 19:00 pm. Vieron una posible crisis como la oportunidad perfecta para fidelizar y ganar nuevos clientes.. Mientras los taxistas se enfocaron en las autoridades, la empresa norteamericana, puso su vista en los clientes.

La gran lección que ha dado Uber se basa en la calidad de servicio que ofrece. Cada día se preocupan más por la atención personalizada y los pequeños detalles. Además, de la posibilidad de prestar servicio de transporte por medio de una app. Un servicio cómodo y más seguro ya que te ofrece la posibilidad de cancelar con tarjeta de crédito.

Otra novedad que ofrece esta aplicación, quizá la más estimada por los usuarios, es la posibilidad de calificar al conductor. Los socios reciben una valoración entre una y cinco estrellas por el servicio entregado. No existe un control directo de la empresa en este aspecto, más bien son los consumidores los que deciden si el conductor continúa o no en el servicio. Un ejemplo de cómo el cliente siempre tiene la razón.